VALÈNCIA. La guerra comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea a cuenta de la disputa por las ayudas públicas a Boeing y Airbus dio estos últimos días un paso para su solución . Al menos se ha puesto fin de manera temporal con la suspensión de los aranceles por ambas partes durante un periodo de cuatro meses.
Esto significa un alivio para las exportaciones de cítricos al mercado estadounidense que, obviamente, se redujeron al mínimo como consecuencia de los aranceles.
Analizamos este asunto con Rafael Ripoll, director del Instituto de Estudios Europeos de la Universidad Católica de Valencia.